lunes, 1 de octubre de 2018
La traición no conoce límites, no sabe de colores, parentescos y amigos, ni de ideologías.
By OGY at lunes, octubre 01, 2018
Mérida, Yuc. 01 de Oct. 2018-.
Ante el ascenso del PAN al gobierno de Yucatán, en la persona de Mauricio Vila Dosal, las redes sociales han comenzado a hervir en señalamientos y denuncias contra la recién concluida gestión de Rolando “Rolo” Zapata Bello, a quien los priistas empiezan a denominar traidor, pues le adjudican haber entregado el Estado a los antagonistas que tantas veces lo señalaron y exhibieron.
En un documento que ha empezado a circular en el ciberespacio, priistas anónimos afirman que el hoy ex gobernador “comenzó traicionando a quien le llevó a la candidatura y a quienes lo llevaron al triunfo electoral, y terminó traicionando a sus compañeros de viaje sexenal. Así cierra su gobierno Rolando Zapata Bello, con una riqueza económica incalculable, administrada y afincada en cuentas, activos en Estados Unidos y paraísos fiscales del Caribe. En medio de las renuncias forzadas de cientos de colaboradores, desde jefaturas de departamento hasta direcciones de área, gente y amigos que hicieron caminar su administración, y que ahora dejan sus puestos sin recibir liquidación alguna, contrariando no solo a la ley sino también a la lealtad que le demostraron”.
Simulaciones
El texto continúa diciendo que “su gestión fue un rompecabezas sin solución, caótico y opaco pero con una simulación permanente de orden y transparencia que costó millones en publicidad. Simulador desde el primer día, Zapata Bello pregonó austeridad y acalló cualquier voz disidente en los medios de comunicación, con billetes a unos y con ataques a otros, y a dos o tres les trató con zanahoria y garrote al mismo tiempo. Se dijo respetuoso de la libertad de expresión, pero no concedió entrevistas a lo largo de su sexenio y siempre acorraló a los reporteros en un cerco que administraba Fernando Castro “Fercas” y regenteaba Sergio Vadillo Lora desde su Palacio cerca del “Chemas”.”
“Para alimentar las apariencias compró y usó cotidianamente cientos de pantalones, camisas, zapatos y cinturones idénticos, pero ocultó la construcción de casas de seguridad que resguardaron (¿o resguardan?) montañas de efectivo que harían palidecer a Zhenli Ye Gon y que en su segundo año de gobierno hicieron prender las alertas al Banco de México, que inició una investigación por la sospechosa falta de circulante en Yucatán”.
“Nada de frivolidades, decía y anunciaba, pero pagó con dinero público encuentros deportivos privados, en su propio estadio familiar llamado Camposueño, con futbolistas profesionales activos y en retiro, leyendas del balompié mexicano, que ensayaban pénaltis con portero de lujo…”
“Se acabaron los dispendios, presumía, pero ocultaba las bacanales en haciendas y mansiones de Yucatán, Quintana Roo y Miami pletóricas de Habana Club y Cohibas, sin faltar edecanes mulatas, como le gustan al líder, sin hablar de los libros que con cargo al erario hizo elaborar para rendir tributo a su familia, incluyendo a sus padres y hermano, y planas completas de una nueva Enciclopedia Yucatanense que dejó para la posteridad la historia de cómo el moderno Yucatán empezó en su gobierno, con fotos incluidas”.
“Cero privilegios, presumió, pero la nómina estatal se llenó de Zapatas, Bellos, Vadillos, Loras, y demás familiares hasta muchos grados de consanguinidad y afinidad que hicieron y deshicieron tan sólo con mostrar sus apellidos e intentaron llevar ese tráfico de influencias a Campeche y Quintana Roo hasta que literalmente les patearon el trasero ¿Verdad Rolando Bello?”
“Respetuoso de la ley, decía, pero su principal funcionario, el guardián de sus dineros, despachaba, operaba y usaba instalaciones, vehículos, personal y recursos públicos sin tener cargo alguno, desde afuera, en lo oscurito, amedrentando empresarios, empleados y al mismo gabinete si no cumplían con las cuotas para su patrón. ¿Verdad, Chernita?”
Combate feroz
El extenso documento que comparten priistas del Mérida y del interior del Estado, prosigue:“Juró combatir ferozmente la corrupción, pero todos los contratos y concesiones de su gobierno implicaron comisiones desde el 30 hasta el 60 por ciento, cobradas por adelantado en efectivo y se entregaban de mano propia en las manos del Turco o la Cherna, en sobres manila con el nombre del “donador” escrito con plumón Esterbrook, y cada noche se recolectaban cajas y cajas de archivo muerto con efectivo bien vivo que se resguardaba (¿o se resguarda?) en las casas de seguridad construidas ex profeso, con paredes de concreto y puertas blindadas.”
“Nada de nepotismo, advirtió, pero mantuvo a su hermano Gabriel como uno de los vicegobernadores, con derecho de pernada sobre la Fiscalía, la Consejería y SEFOE, además de ser el capataz de Celis, en el Poder Judicial. Por cierto, la última acción del gobierno de Rolo fue asignar cierta jugosa pensión fuera de norma y ética. ¿Verdad Naxón?”
“Se presentaba con sus ex vecinos de la Felipe Carrillo Puerto y decía que su estilo de vida era sencillo, casi franciscano, pero en realidad se construyó dos mansiones en el Country Club, la colonia favorita de su gabinete en la que al menos ocho funcionarios compraron lotes y casas, y después compró departamento en Brickell, en Miami, y en La Habana, todo esto con la complacencia de Central 9 del Diario de Yucatán, que tuvo los datos de primera mano y decidieron no publicar nada. ¿Billete, miedo o complicidad, Carlitos Menéndez?”.
Obras de tablarroca
“Criticó y abandonó las obras heredadas del régimen priísta anterior y pregonó que él no dejaría nada inconcluso, pero los edificios que anunció como su “legado” usaron material de pésima calidad o de plano tablarroca, cobrado a precios de mármol y granito, y el único hospital que emprendió, lo dejó a medio terminar aunque pagó planas y minutos para decir lo contrario…”
“Decía y decía que era impoluto y libre de cualquier sombra de corrupción, pero su gobierno hizo de la mordida un trámite más, un requisito para obtener contratos o una obra, por pequeña que fuera. Y de la tajada del jefe para abajo, miles de adjudicaciones tuvieron que inflar sus precios o rebajar la calidad para cubrir las cuotas, que engrosaron chequeras de quienes hasta antes del gobierno de Rolo eran choferes, destapacervezas en bares, sacaborrachos de antros o vendedores de clandestino.”
“Se salvó de escándalos en familia porque sus hijos son muy jóvenes aún, pero sus colaboradores se sirvieron con la cuchara grande y no cerraban bares ni restaurantes: los compraron, o incluso compraron negocios en Estados Unidos y el Caribe, con especial cariño a la Isla que resguarda páginas sentimentales”.
“Predicó la virtud y la decencia, otorgando cargos y beneficios a sus hermanos de fe, pero al mismo tiempo vivió una farsa personal durante años, en un acuerdo que no evitó que su consorte legal le hiciera desfiguros y desplantes públicos, acallados por sus defensores oficiosos”.
Traiciones políticas
En el documento, los anónimos priístas revelan una serie de reuniones y pactos presuntamente realizados para la “entrega” del Estado:
“Al final, cuando todo era evidentemente perdido, la reunión en la casa de San Ramón Norte, y las reuniones en Cancún que definieron el pacto para la entrega quince días antes de la elección. La Cherna no entregaría más billete a la campaña; Vadillo se dedicaría a esquilmar a la campaña adjudicando contratos a su empresa de publicidad; El día D toda la operación de Mérida se dejó en manos de un seguro perdedor, Caballero, traicionado a su vez por sus más allegados, como el famoso “Quity”. No se podía esperar más que la derrota”.
“Pero, ¿derrota para quién?”
“Ya desde semanas antes de la elección, arregló su salida “democrática”: reconocer el triunfo del PAN en una segunda alternancia, estorbar cualquier intento de los priistas de impugnar la elección, acallar cualquier expresión de resistencia. El resultado estaba definido mucho antes de que los yucatecos salieran a depositar sus votos. Y todo esto a espaldas de los principales afectados: el priismo y sus candidatos”.
“Lo demás fue trámite maquiavélico que encerró a todos los colaboradores de confianza, priístas en el gobierno, en una trampa insospechada: primero les pagaron la quincena del 30 de septiembre con una semana de anticipación. Después, a todos se les indicó que “por instrucciones superiores” debían firmar sus renuncias efectivas al 1 de octubre, sin cobrar la parte proporcional de aguinaldo ni la prima vacacional que por derecho les correspondía. Una aberración jurídico-laboral, pero un compromiso de Rolando con Vila, para dejar las arcas estatales llenas y dar a los priistas una última estocada al maltrecho honor, orquestada desde Palacio. ¿Verdad, Marta?”
“El que empezó traicionando, terminó traicionando. Pero con las bolsas bien llenas, en México, en Miami y en el Caribe. Y con cargo nuevo, que vaya si costó sus buenos dineros abonables al fondo perdido del CEN. Triste legado de un hombre que nunca pudo superar sus complejos y que acabó hundiendo a su partido y dejando sin empleo a miles de priistas que ahora cargarán con la pesada lápida de la derrota, herencia del autonombrado mejor gobernador”.
Duras palabras las que circulan en este texto de priistas dolidos por una derrota histórica, y que parece ser solo la punta de un iceberg de inconformidades, pues apenas empezará “la barredora” panista y los que antes dependían de sus empleos en el gobierno verán su suerte, ahora sin quincenas para cobrar. Estaremos pendientes de cómo se mueven las redes sociales